En el tenis profesional, un jugador wild card puede añadir emoción a un torneo o ser fuente de controversia. El sistema de comodines también se utiliza para convertir a los jugadores jóvenes en los profesionales del mañana.
Regulaciones de Wild Card
El deporte del tenis está regido por la Federación Internacional de Tenis (ITF), que estableció las reglas para el juego en torneos y sanciona a los grandes torneos como Wimbledon en Gran Bretaña y el Abierto de Francia. Pero la ITF no establece reglas para los comodines. En lugar de ello, delegan esa autoridad a organismos gubernamentales nacionales, como la Asociación de Tenis de los Estados Unidos (USTA), que establece los estándares para el juego en los Estados Unidos y organiza torneos importantes como el Abierto de los Estados Unidos y los circuitos competitivos.
La UTSA ha establecido pautas para el tenis masculino y femenino y que califica para el juego wild card. No todo el mundo puede solicitar ser un jugador wild card; hay que tener un récord establecido de juego a nivel universitario, amateur o profesional y cumplir con otros criterios. La UTSA otorga la calificación de comodín tanto a nivel junior como profesional. Para los jugadores en desarrollo, el estatus de wild card puede abrirles las puertas a torneos importantes para los que de otro modo no podrían clasificarse, ofreciéndoles una exposición significativa.
Los otros grandes organismos internacionales de tenis, como la Asociación Británica de Tenis en el Césped y Tenis Australia, tienen políticas similares con respecto al estatus de wild card. Al igual que con la USTA, los jugadores tienen que solicitar el estatus de comodín, que puede ser revocado por infracciones a las reglas.
Juego de Torneo
Los jugadores de tenis califican para jugar torneos a nivel nacional e internacional de una de estas tres maneras: entrada directa, clasificación previa o wild card. La entrada directa se basa en la clasificación internacional de un jugador, y los torneos importantes reservarán un cierto número de espacios para estos jugadores. Los jugadores que califican obtienen la admisión ganando partidos en eventos menores que tienen una relación con el torneo. Las selecciones de comodines se dejan en manos de los organizadores de los torneos.
Los jugadores pueden ser elegidos como comodines por cualquier número de razones. Pueden ser jugadores muy conocidos que siguen siendo competitivos pero que ya no están muy bien clasificados, o aficionados en ascenso que aún no tienen un ranking de clasificación. Por ejemplo, Kim Clijsters, Lleyton Hewitt y Martina Hingis han jugado en el Abierto de Estados Unidos en los últimos años sólo porque eran wild card. Un jugador wild card también puede ser un pariente desconocido en el mundo del tenis, pero que puede ser uno de los favoritos locales o regionales.
Controversia de los comodines
Los comodines también se conceden a veces a los jugadores que han estado fuera del foco de atención durante un período prolongado de tiempo. Ocasionalmente, esto puede dar lugar a controversias. Un ejemplo reciente es el de Maria Sharapova, la estrella rusa del tenis que fue suspendida en 2016. En 2017, tras la expiración de su suspensión, Sharapova obtuvo un puesto de comodín en el Abierto de Estados Unidos. Aunque algunos grandes del tenis elogiaron la decisión, como Billie Jean King, otros criticaron a la USTA por su decisión. Ese mismo año, los funcionarios del Abierto de Francia se negaron a ofrecer a Sharapova una plaza de comodín, lo que la hizo inelegible para competir en ese evento.